Empiezo despertando tarde, corro a la escuela, entro a ese extraño lugar que se llama herbario. Noto el olor característico a éter y materiales herborizados, corro al final de este lugar cuando un gnomo bibliotecario salta y me hace un acertijo:
- ¿Qúe familia de las plantas vasculares es de muy difícil cultivo, presentan estucturas modificadas en lugar de pétalos, esporofitos aéreos y las utilizan mucho para la industria alimenticia por su olor, sabor y texturas?
Dudo un poco, pero mi amplio conocimiento responde ágilmente:
- Pues obvio que la Familia Orquidiaceae, así que déjame pasar.
El pequeño gnomo bibliotecario lanza golpes y maldiciones al aire, pero deja que pase. Corro hacia el examen rapidamente, cuando noto que un jinete rojo montado en su corcel rojo igual pasa a un lado mío, ahora empieza el atardecer.
Frente a mi, no hay más que silencio y hojas; cerca de un estante diviso al Sr. conocedor de hongos, se que se avecina una catástrofe si el se acerca a mi cuando de repente.....
- ¿Por qué te escondes niño, vas en busca del destino o huyes de él sin tino?
- Hola señor. Estoy perdido, mi examen es en unos momentos y nada mas no encuentro el camino. He gastado zapatos de hierro, se me ha roto mi cayado y perdido mi gorro; ¿usted me prodría ayudar a encontrar mi camino?
- Te será dificil encontrarlo, pero yo te ayudaré. La manera más rápida de llegar a los confines del herbario, es en caballo. Toma este hechizo, pero no lo menciones hasta que yo me haya perdido en el horizonte...
- Gracias señor, tome un hongo a cambio de su ayuda.
El Señor no hace más que sonreir y desaparecer después de unos momentos.
Siento una presencia cerca, un jinete negro montado en su caballo negro pasan a lado de mí, ahora es de noche. Recuerdo el hechizo que me regaló el señor de los hongos, veo que no haya nadie y pronuncio fuertemente:
- Caballo morcillo, caballo tordido, caballo hechizado, hermoso alazán, detente a mi lado, bello rubicán.
Como por arte de birlibirloque, apareció el caballo. Sus cascos hacían retemblar la tierra, sus ollares despedían llamas, y sus orejas, penachos de humo. Inmediatamente monto en el, galopa el caballo, la tierra retumba, bajo sus cascos desaparecen los montes y valles. Me ha dejado en mi destino. El caballo desaparece.
Llegué a un lugar donde había una casita sobre patas de gallina, rodeaba a la casita una cerca con estacas coronadas por cráneos de alumnos reprobados en los que ardía fuego...
- Casita, casita, vuelve tu puerta hacia mí y tu fachada hacia el herbario.
La casita volvió su puerta hacia mi. Entré y allí estaba una maestra con los pies apoyados en los ángulos de la habitación, los labios sobre el vasar y la nariz pegada al techo. Me ve la maestra y se puso a alborotar
- ¡Fu, fu!, ¡huele a reprobado! ¿quién anda ahi?
-Soy yo maestrita, he venido a hacer mi examen.
- En fin, a lo hecho, pecho.
Me pongo a aplicar todo mi conocimiento, saco mis instrumentos, mis documentos antiguos con los que identifico las plantas que piden. En un abrir y cerrar de ojos, había terminado. La maestra observando minuciosamente todo mi trabajo, hace una reverencia y sale de la habitación montada en su almirez, empuñando el majadero a guisa de látigo y borrando su huellas con la escoba.
Todo a terminado. Pasa un jinete blanco montado en su caballo blanco, indicandome que empieza a amanecer; camino tranquilamente a casa, lo peor a pasado.
miércoles, 16 de enero de 2008
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6 comentarios:
heyyyyy se ve q estuvo dificil tu examen !! jajajaajajajaja wwwwwwooooooowwww muak muak !!
OORALES, HAS ENTRADO AL CLUB DE LA FICCION! Y DE LOS HONGOS ALUCINOGENOS
No es ficción, sí que pasó ¿o me equivoco?
Yo digo que si pasó , además solo al señor Boris le pasan esas cosas!!!
OOOOOOOOOOrale!
Un besoooooooooote!
wow...no tengo palabras, bueno, si, tengo muchas, pero las vendo, no las voy a andar regando por ahi como si no hubiera un mañana! besos señor Boris, excelente su narración sobre su vida escolar
jeje es como harry potter con Mrs Sprout! o algo asi
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